Tartrazina: productos peruanos deberán incluir nuevo etiquetado por riesgo en niños

tartrazina

La tartrazina vuelve al centro del debate sanitario en Perú. La Dirección General de Salud Ambiental e Inocuidad Alimentaria (Digesa) emitió una nueva disposición obligatoria que obliga a todas las empresas a modificar el etiquetado de productos alimenticios que contengan este colorante artificial, también conocido como “amarillo 5”. Esta medida tiene como objetivo advertir al público, especialmente a los padres de familia, sobre los potenciales efectos adversos de su consumo, particularmente en niños.

A partir del 20 de junio de 2026, todos los alimentos que contengan tartrazina deberán incluir en su etiqueta, al final de la lista de ingredientes, las siguientes frases en letra mayúscula y negrita:

  • CONTIENE TARTRAZINA
  • Uso recomendable de hasta 7,5 mg/kg peso/día

La medida responde a los posibles efectos negativos de este aditivo, los cuales incluyen el empeoramiento de alergias y asma en menores de edad, según advirtió la nutricionista Jessica Huamán, exdecana del Colegio de Nutricionistas de Lima.

¿Qué productos están involucrados?

Entre los alimentos y bebidas más comunes en el mercado peruano que deberán adaptarse al nuevo etiquetado se encuentran:

  • Gaseosas como Inca Kola, Concordia y Sabor de Oro.
  • Bebidas saborizadas como Cifrut, Frutaris y algunas variedades de Frugos del Valle.
  • Snacks como Chizitos, Cheetos y Papas Lays.
  • Dulces como Gomitas Trululú y gelatinas Universal.
  • Wafers y golosinas como Wafer Nick.
  • Bebidas deportivas como Powerade.
  • Aguas saborizadas, incluidas varias versiones de Aguas San Luis.

El uso de la tartrazina está muy extendido en alimentos de color amarillo o con tonos anaranjados intensos, aunque algunos productos pueden contener el colorante sin que su color lo sugiera de inmediato.

Un riesgo silente en la dieta diaria

La tartrazina es un colorante sintético derivado del petróleo, aprobado para su uso en muchos países, pero bajo estrictas regulaciones. La nueva medida de Digesa busca reforzar la información que reciben los consumidores y mitigar riesgos sanitarios, especialmente para los grupos más vulnerables como los niños.

Aunque desde el año 2012 ya se exigía declarar la presencia de tartrazina en las etiquetas, la inclusión de la dosis máxima recomendada es una novedad. Esto se basa en estándares internacionales como los del Codex Alimentarius, que recomiendan no superar los 7,5 mg por kilogramo de peso corporal al día.

¿Qué más exige la nueva normativa?

Además del nuevo texto en el etiquetado, Digesa exhorta a las empresas a sustituir progresivamente este aditivo por otros más seguros, en especial en alimentos dirigidos a menores de edad. Aunque esta recomendación no es de cumplimiento obligatorio, las empresas deben tramitar cualquier cambio a través del procedimiento administrativo conocido como TUPA 31.

Digesa ha dado un plazo de 365 días calendario desde el anuncio oficial, por lo que al 20 de junio de 2026, todos los productos con tartrazina deben llevar el nuevo etiquetado visible. Si no lo hacen, estarán incumpliendo con una norma sanitaria de carácter obligatorio.

¿Qué deben hacer los consumidores?

Frente a esta realidad, los especialistas recomiendan leer siempre la lista de ingredientes, optar por productos naturales o mínimamente procesados, y evitar en lo posible el consumo regular de alimentos ultraprocesados con aditivos como la tartrazina. También se aconseja estar atentos a cómo responde el organismo —especialmente en niños— tras el consumo de estos productos, y consultar con profesionales de salud ante cualquier síntoma anómalo.

(Con información de Infobae)