Seguro de desgravamen ya no será obligatorio

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Seguro de desgravamen ya no será obligatorio para préstamos vehiculares y personales

La Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS) eliminó la obligatoriedad del seguro de desgravamen para préstamos vehiculares, personales y tarjetas de crédito. Esta medida, establecida en la Resolución SBS N° 00890-2025, busca mayor transparencia y libertad de elección para los usuarios.

Excepción en créditos hipotecarios

El seguro de desgravamen seguirá siendo obligatorio solo para créditos hipotecarios. La SBS justifica esta decisión por su papel clave en proteger a los herederos y mitigar riesgos crediticios en préstamos de largo plazo y alto monto.

¿Qué cambia para los usuarios?

A partir de septiembre de 2025, los consumidores podrán decidir si contratan o no el seguro de desgravamen en préstamos no hipotecarios. Las entidades financieras deberán ofrecer al menos una opción sin este requisito.

Transparencia y consentimiento informado

La resolución exige que las entidades informen claramente sobre los costos y beneficios del seguro de desgravamen. Además, deberán obtener el consentimiento expreso de los usuarios que opten por contratarlo voluntariamente.

Impacto en el sistema financiero

Esta medida representa un giro significativo en las prácticas del sector. Las entidades financieras deberán adaptar sus políticas y ofrecer productos más flexibles, lo que podría reducir costos para los usuarios.

Protección a personas con discapacidad

La SBS también incluyó disposiciones para garantizar que personas con discapacidad accedan a todos los servicios financieros, promoviendo inclusión y equidad en el sistema.

Antecedentes del seguro de desgravamen

Históricamente, este seguro ha sido un requisito común en Perú, aunque no obligatorio por ley. Su propósito es proteger a los familiares del deudor en caso de fallecimiento o invalidez, evitando que asuman la deuda o pierdan bienes en garantía.

Futuro del mercado de seguros

La medida podría impulsar mayor competencia en el sector, permitiendo a los usuarios contratar seguros de desgravamen con aseguradoras externas, siempre que cumplan con los requisitos de las entidades financieras.


La eliminación de la obligatoriedad del seguro de desgravamen marca un avance hacia un sistema financiero más transparente y centrado en el usuario. Sin embargo, su impacto real dependerá de cómo las entidades implementen estas nuevas disposiciones.