La derrota de Perú ante Paraguay marcó el final de unas Eliminatorias desastrosas y dejó la imagen más dura: Paolo Guerrero, desde la tribuna, acompañando a sus compañeros en el cierre de un proceso sin rumbo. Su despedida en los vestuarios fue un símbolo de liderazgo en tiempos de crisis.
Un final sin gloria para la ‘bicolor’
La selección peruana cerró las Eliminatorias Sudamericanas al Mundial 2026 con una nueva derrota (1-0 ante Paraguay en el Estadio Nacional de Lima), consumando así un proceso que se recordará por la falta de ideas, gol y resultados.
Los números lo dicen todo: apenas 6 tantos en 18 partidos, todos anotados en casa y ninguno como visitante.
Un registro que refleja no solo un déficit ofensivo, sino también la ausencia de un proyecto sólido que sostenga el recambio generacional.
El Depredador, presente en la tribuna
Paolo Guerrero, el máximo goleador histórico de la selección peruana, estuvo en el Estadio Nacional acompañado de su esposa.
A sus 41 años, el atacante de Alianza Lima no fue convocado para este proceso, y probablemente vivió desde las gradas su último partido oficial junto a la ‘bicolor’.
Su expresión de desolación durante el encuentro se convirtió en un espejo del sentimiento de millones de hinchas que volvieron a ver a su país sin Mundial.
El gesto tras el pitazo final
Sin embargo, Guerrero no se limitó a ser un espectador. Tras la derrota, bajó a los vestuarios para saludar a sus compañeros, ofrecer palabras de aliento y cerrar así un ciclo de más de 15 años defendiendo la camiseta nacional.
El ‘Depredador’ fue parte de la generación que llevó a Perú de regreso a un Mundial en 2018, tras 36 años de ausencia, y su legado trasciende los goles: liderazgo, compromiso y ejemplo de profesionalismo.
Perú sin Guerrero y sin gol
La ausencia del capitán deja a la selección en un vacío profundo. Con Gianluca Lapadula atravesando un mal momento en Italia y con jóvenes como Luis Ramos aún sin consolidarse, el panorama es incierto. ¿Quién tomará el liderazgo ofensivo en un equipo que no encuentra alternativas?
El próximo comando técnico tendrá que reconstruir desde la base: recuperar la confianza, trabajar en menores y encontrar variantes reales que devuelvan la competitividad a la selección.
Sin gol y sin Guerrero, la ‘bicolor’ queda huérfana de referentes en ataque.
Un futuro en deuda
La imagen de Guerrero despidiéndose en silencio de sus compañeros es también una postal de la deuda que tiene el fútbol peruano con sus hinchas: un proyecto serio y sostenido que permita soñar con otro Mundial.
Mientras tanto, los fanáticos agradecen al ‘Depredador’ por haber liderado con coraje una generación que rompió maleficios, aunque el presente vuelva a teñirse de frustración.