La Policía Nacional descubrió un centro de falsificación de billetes que operaba en pleno Conjunto Habitacional Manzanilla, donde se elaboraba dinero ilícito con destino a los principales mercados de Lima.
Una librería con doble rostro
En un operativo ejecutado por el Grupo Terna del Escuadrón Verde, la Policía Nacional del Perú (PNP) intervino un inmueble ubicado en la cuadra cuatro de la avenida Nicolás Ayllón, en el distrito de La Victoria. El local funcionaba bajo la fachada de librería, pero en realidad escondía un taller especializado en falsificación de dólares.
Durante la acción, se incautaron 1.2 millones de dólares falsos listos para ser cortados y distribuidos en el mercado informal de la capital.
El hallazgo pone en evidencia la magnitud de las redes criminales dedicadas a este delito, que afecta tanto al comercio como a la confianza en el sistema financiero.
¿Cómo operaba la imprenta clandestina?
En el interior del local se encontraron impresoras offset, planchas, cuños y maquinaria especializada para replicar billetes de 10, 20, 50 y 100 dólares. Los equipos permitían imitar texturas y relieves de los originales, dificultando la detección en transacciones rápidas.
El coronel Jhonny Loayza Vega, jefe del GRECCO A, señaló que el taller tenía capacidad para producir grandes cantidades de billetes en un solo día, abasteciendo de forma continua al mercado negro.
El impresor detrás del delito
Durante la intervención fue detenido Rafael Carruitero Lozano, de 54 años, un impresor con más de 40 años de experiencia en el sector gráfico. Según la investigación, Carruitero utilizó sus conocimientos técnicos para dotar a los billetes falsos de un acabado casi profesional.
El detenido confesó haber participado en la falsificación por necesidad económica, recibiendo pagos de entre 1,000 y 2,000 soles por cada lote producido. Sin embargo, la PNP sostiene que su rol era permanente y esencial dentro de la red.
El destino del dinero falso
Las pesquisas preliminares revelaron que los billetes tenían como principales destinos mercados mayoristas y centros de comercio masivo, entre ellos:
- Unicachi, en Comas
- La Parada, en La Victoria
- Mercado de Huaycán, en Ate
Estos lugares son ideales para el movimiento de dinero ilícito debido al alto volumen de transacciones en efectivo. A pesar de la incautación, la Policía no descarta que otros lotes ya hayan ingresado en la economía informal limeña.
Una organización con alcance mayor
El coronel Loayza advirtió que el operativo demuestra la existencia de una organización criminal sostenida en el tiempo, cuyos encargos respondían a pedidos específicos de grupos dedicados a la circulación de dinero falso.
El caso quedó en manos del Ministerio Público, que evaluará las responsabilidades penales y ampliará las investigaciones para dar con los demás integrantes de la red. La División de Investigación Criminal (DIRINCRI) también analizará las rutas de distribución y los nexos con mafias locales.
Un golpe, pero no el final de la lucha
Aunque la incautación de 1.2 millones de dólares falsos representa un duro golpe al crimen organizado, la magnitud del hallazgo confirma la necesidad de reforzar los controles en los mercados mayoristas y en la circulación de divisas.
La falsificación no solo genera pérdidas económicas, sino que erosiona la confianza ciudadana en las instituciones y en el comercio formal.
El reto de la PNP y del sistema judicial será no solo detener a los operadores directos, sino también identificar a los financistas y redes de distribución que mantienen vivo este lucrativo negocio ilícito.