El turrón de Doña Pepa: símbolo limeño con sabor a tradición y precaución en su consumo

Disfrutando una deliciosa torre de panqueca con jarabe, fruta y confites en Loreto Noticias, Perú.

Cada mes de octubre, Lima se impregna del aroma dulce y especiado del turrón de Doña Pepa, un postre que se ha convertido en emblema de la identidad limeña y en compañero inseparable de la devoción al Señor de los Milagros. Su colorido, textura y sabor evocan las celebraciones del mes morado, cuando miles de familias lo consumen como parte de una tradición que une fe, historia y gastronomía.

Sin embargo, detrás del placer de su sabor, especialistas advierten sobre los riesgos de su consumo excesivo. Según el Colegio de Nutricionistas de Lima, 100 gramos de turrón aportan alrededor de 558 kilocalorías, debido a su alta densidad energética. Por ello, recomiendan disfrutarlo con moderación y prestar atención a los grupos poblacionales que deberían evitarlo o reducir su ingesta.

¿Quiénes deben limitar el consumo de turrón?

Los expertos en nutrición destacan que el turrón de Doña Pepa puede representar un riesgo para ciertas personas:

  • Personas con diabetes: el postre contiene grandes cantidades de azúcares refinados que elevan rápidamente la glucosa en sangre, dificultando el control glicémico y aumentando el riesgo de complicaciones.
  • Pacientes con hipertensión o enfermedades cardiovasculares: por su contenido en grasas procesadas, puede elevar los niveles de colesterol y triglicéridos.
  • Niños: el exceso de dulces favorece la caries, el sobrepeso y los desequilibrios metabólicos en edades tempranas.
  • Adultos mayores: el metabolismo más lento y las enfermedades crónicas hacen que los alimentos con alto contenido de azúcar y grasa sean perjudiciales.
  • Personas con sobrepeso u obesidad: el turrón aporta muchas calorías con bajo poder saciante, lo que puede dificultar el control del peso y agravar enfermedades metabólicas.

En todos los casos, los nutricionistas recomiendan consultar a un profesional y limitar las porciones en lugar de eliminar completamente el postre.

El lado menos dulce del turrón

El riesgo del turrón proviene principalmente de su composición: azúcares refinados, jarabes de frutas y grasas saturadas o trans. Estos ingredientes, en exceso, pueden generar:

  • Picos glicémicos que contribuyen a la resistencia a la insulina y al desarrollo de diabetes tipo 2.
  • Aumento del colesterol y triglicéridos, elevando el riesgo de enfermedades cardíacas.
  • Procesos inflamatorios y estrés oxidativo que dañan el metabolismo.
  • Caries dental, especialmente si no se mantiene una buena higiene bucal.

Tradición con equilibrio

El turrón de Doña Pepa es más que un dulce: representa la fe, la historia y la cultura del Perú. Pero como todo postre tradicional, su consumo debe ir acompañado de moderación y conciencia nutricional. Disfrutarlo una vez al año como parte de la festividad del Señor de los Milagros no representa un riesgo para la mayoría de las personas, siempre que se mantenga una alimentación equilibrada.

(Con información de Infobae)